El Fuego de la Prueba

Zacarías 13:8-9

Las dos terceras partes del país serán abatidas y perecerán; sólo una tercera parte quedará con vida, afirma el Señor. Pero a esa parte restante la pasaré por el fuego; la refinaré como se refina la plata, la probaré como se prueba el oro. Entonces ellos me invocarán y yo les responderé. Yo diré: "Ellos son mi pueblo", y ellos dirán: "El Señor es nuestro Dios."

REFLEXIÓN:

A lo largo de la historia del pueblo de Israel, cada vez que toda la nación parecía volverse en contra de Dios. Sólo un pequeño remanente continuaba confiando en Él y le seguía. Todas estas personas que continuaban creyendo en Él, fueron refinadas como la plata y el oro, mediante el fuego de sus circunstancias difíciles.

¿Porqué Dios prueba al remanente?
En una oportunidad escuché un ejemplo maravilloso que quisiera compartir con ustedes e ilustra un poco el porqué Dios prueba a ese remanente: En el mundo de los caballos hay una raza en particular que se les llama “Los paso fino” estos caballos son conocidos por su elegante y artístico andar, estos son puestos en escena en desfiles y eventos muy especiales. Para que esta raza de caballos pueda llegar a este punto tienen que pasar por un proceso de domaje bastante fuerte, lo primero que se hace es buscar un buen jinete que esté bien entrenado y después se pasa al caballo a través de un tratamiento bien difícil para quebrar toda su voluntad y lograr así lo que se llama “La obediencia instantánea” esta característica genera en el caballo una obediencia tal que con solo una señal hace lo que dice su amo, entrenador o jinete, en muchos casos este proceso puede durar hasta años en llevarse a cabo ¿Qué pasaría si se intenta montar un caballo para que camine como los “Paso fino” si aún no ha pasado por este proceso? Lo primero que hace es lanzar o botar al jinete y hasta puede salir desbocado dando brincos incontrolables. Si llevamos este ejemplo a lo que Dios intenta hacer con nosotros, podríamos decir que hace exactamente lo mismo, todos somos pasados por un proceso de domaje llamado “El Fuego de la prueba”, si obviamos o rechazamos la prueba lo primero que pasaría es que lanzaríamos al Jinete que es nada más y nada menos que Jesucristo y muchos terminaríamos apartados de Él y sufriendo las consecuencias del pecado.

¿Cuáles son las razones por las cuales Dios permite que nuestra vida sea sometida a este proceso?
Estudiando este tema encontré tres razones principales:

1. Para que su nombre no sea pisoteado: Isaías 48:10-11 dice; He aquí te he purificado, y no como plata; te he escogido como horno de aflicción. Por mí, por amor de mi mismo lo haré, para que no sea amancillado mi nombre, mi honra no la daré a otro.
2. Para perfeccionarnos: 1 Pedro 5:10 dice; más el Dios de toda gracia, que nos llamó a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca.
3. Para probar nuestra Fe: 1 Pedro 1:7 dice; para que sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo.

La biblia dice que Jesucristo es completamente hombre y completamente Dios (Ver Fil. 2:6-8) Completamente hombre porque Él mismo fue pasado por el Fuego de la prueba en todo el sentido de la palabra, Hebreos 4:15 dice; Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado. Fíjense que dice “En todo” dinero, fama, placeres, orgullo, vanagloria, etc., y también dice; Y aunque era Hijo, por lo que padeció aprendió la obediencia Hebreos 5:8. Si Jesucristo siendo el Hijo de Dios tuvo que ser pasado por el fuego de la prueba, imagínense nosotros.

El Fuego de la prueba es algo que el ser humano busca evitar, por una razón muy sencilla; el ser pasado por este proceso causa mucho dolor y sufrimiento. Permítanme contarles que cuando estaba recién comenzando en los caminos del Señor, la persona que me había enseñado el plan de salvación me dijo esto: “Tu fe será probada” en el momento lo entendí y pensé que era lógico pero lo que no alcanzaba a comprender fue lo que tuve que vivir al comienzo. Hoy puedo decir con propiedad que he sido pasado por el fuego de la prueba y veo lo que al principio no veía. Haciendo un autoanálisis también puedo decir que actualmente soy una persona diferente, mejor que ayer y peor que mañana, todo esto gracias al Fuego de la prueba y como dice el salmista: Bueno me es haber sido humillado, Para que aprenda tus estatutos Salmo 119:71. Amigos les cuento esto porque es muy probable que algunos de ustedes hayan tenido que pasar por “El fuego de la prueba”, pero les hago una pregunta ¿Son mejor que Ayer?

SABÍAS QUE???

Tenemos a un sumo sacerdote que se compadece de nuestras debilidades porque pasó por todas y cada una de las pruebas que nosotros hemos tenido que vivir, ese se llama JESUCRISTO, (Ver Hebreos 4:15)

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